DECLARACIÓN FINAL DE LA ASAMBLEA SINODAL CONTINENTAL DE LAS IGLESIAS CATÓLICAS DE ORIENTE MEDIO

By: https://www.synod.va - [email protected] - Published: February 18 Sat, 2023

DECLARACIÓN FINAL DE LA ASAMBLEA SINODAL CONTINENTAL DE LAS IGLESIAS CATÓLICAS DE ORIENTE MEDIO Available in the following languages:

LÍBANO - El viernes 17 de febrero de 2023, la Asamblea Continental Sinodal de las Iglesias Católicas de Oriente Medio concluyó su conferencia, que se celebró del 13 al 17 de febrero en Betania-Harissa. Al término de la reunión se emitió la siguiente declaración:


Nosotros y nuestro Pueblo Orante damos gracias al Espíritu Santo que nos ha conducido juntos por una Iglesia sinodal y nos ha inspirado a rezar juntos en comunión, participación y misión a través de esta Asamblea Sinodal Continental de Iglesias Católicas en Oriente Medio que ha reunido a la familia católica con sus siete iglesias en Bethania - Harissa durante una semana, del 13 al 17 de febrero.

 

Este encuentro se produce en circunstancias difíciles para nuestra región, sobre todo económicas y humanitarias, en particular por las repercusiones del devastador terremoto que asoló a nuestros hermanos de Siria y Turquía. Por ello, los participantes de la asamblea reflexionaron sobre este doloroso y desgarrador evento y ofrecieron oraciones diarias por las víctimas, heridos y desplazados en las zonas afectadas.

 

Y como somos hijos de la Resurrección, hemos continuado la obra de esta asamblea, que es el escenario continental y el eslabón en el camino sinodal que continúa. Agradecemos a los patriarcas Su Beatitud el Cardenal Mar Bechara Boutros Al-Rahi, Patriarca de la Iglesia Maronita;Su Beatitud el Patriarca Ibrahim Isaac, Patriarca de la Iglesia Católica Copta; Su Beatitud el Patriarca Mar Ignatius Youssef III Younan,Patriarca de Antioquía de los Sirios; Su Beatitud el Patriarca Youssef Al-Absi, Patriarca de los Melquitas Griegos; Su Beatitud el Cardenal Mar Louis Raphael Sako, Patriarca de Bagdad de los Caldeos; Su Beatitud el Patriarca Raphael Bedros, 21º Patriarca de Cilicia de los Armenios, y Su Beatitud Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén, quienes se dedicaron con las delegaciones participantes de Egipto, Siria, Jordania, Tierra Santa, Irak, Líbano y los Estados del Golfo al éxito del trabajo de esta Asamblea, y a sacar a la luz las cosas positivas profundas que unen a nuestras iglesias y establecen su presencia como Iglesia de esperanza en los países de Oriente Medio a pesar de su presencia en el corazón de la adversidad, como Iglesia que desafía la realidad impuesta.

 

Los participantes en los trabajos de la Asamblea agradecieron también al Secretario General del Sínodo, Cardenal Mario Grech y al Relator General de la próxima Asamblea General del Sínodo de los Obispos, Cardenal Jean-Claude Hollerich, Arzobispo de Luxemburgo y Sor Nathalie Becquart, Subsecretario de la Secretaría General del Sínodo por su presencia en los trabajos de la asamblea y por haber vivido con ellos esta experiencia sinodal, que ha dinamizado especialmente la vida de la Iglesia católica en Oriente y en el mundo. Todo esto tiene lugar como lo pidió Su Santidad el Papa Francisco a los hijos de la Iglesia Católica en el mundo para "revisar su vida cristiana y para 'caminar juntos' a la luz del Evangelio y las necesidades del tiempo presente en preparación para el Sínodo que se celebrará en la Ciudad del Vaticano en octubre de 2023 y 2024, con el título: “Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión”.

 

La etapa continental, que tuvo lugar en Bethania - Harissa, se centró en la oración, el discernimiento espiritual y la reflexión conjunta, trabajando durante una semana lo surgido durante la primera etapa de consultas en las Iglesias locales de varios países de Medio Oriente y el Golfo.

 

Y reafirmó las siguientes constantes fundamentales de la Iglesia: 

 

1. La sinodalidad está en el centro del patrimonio de nuestras iglesias orientales.

2. Unidad en la diversidad por la unidad en la comunión, misión y testimonio de las Iglesias.

3. Las raíces comunes de las Iglesias como base de un mensaje unitario.

4. La presencia y los talentos de los laicos al servicio del Cuerpo de Cristo. El papel de los jóvenes, sus capacidades y sus expectativas de una Iglesia renovada reflejan los desafíos que enfrentan.

5. La importancia del papel y la misión de la mujer en la iglesia y su participación en la toma de decisiones y el servicio.

6. La liturgia es nuestra vida y la llamada a una renovación litúrgica compatible con las aspiraciones de nuestros jóvenes, conservando su esencia y sus símbolos.

7. La invitación a un ecumenismo creativo y renovado y a estimular el diálogo ecuménico.

8. La Iglesia de apertura a los demás diferentes a nivel eclesiástico y religioso, a través de la escucha, el diálogo y la unión, en la convivencia, el diálogo, la colaboración y el respeto mutuo, para mostrar el rostro del único Dios.

9. Comunión y esperanza en el sufrimiento: hacia una Iglesia humilde como un "grano de mostaza" (Mateo 13/31-32), llamada a crecer y expandirse entre el desafío de la supervivencia y el rechazo de la emigración.

10. Misión, testimonio y estructuras renovadas para una Iglesia más sinodal.

11. Una pastoral especializada para las familias, las mujeres y los jóvenes.

12. La importancia de los medios y la cultura digital como herramienta de comunicación eficaz en manos de la Iglesia para transmitir su mensaje de manera más completa.

13. Proseguir el espíritu de sinodalidad en cada Iglesia en particular con la pregunta central: ¿cómo puede ser cada Iglesia más sinodal a la luz del trabajo de esta Asamblea Continental de Iglesias Católicas en Oriente Medio?

Conclusión

El tiempo de la Santa Cuaresma, que comienza el próximo lunes 20 de febrero, es el momento apropiado y especial para escuchar lo que el Espíritu está diciendo a nuestras iglesias mientras escuchamos la palabra de Dios, oramos, nos arrepentimos y realizamos actos de amor y misericordia hacia nuestros hermanos y hermanas en sus necesidades materiales, espirituales y morales, por intercesión de Nuestra Señora del Líbano, Madre de la Iglesia y Reina de los Apóstoles.