BEER SHEVA – El 8 de noviembre, el Centro para el Estudio de la Conversión y los Encuentros Interreligiosos (CSoC) otorgó a tres ganadores el Premio Ecuménico y Social 2022 Ladislaus Laszt, para honrar su compromiso con el diálogo interreligioso.
El premio, creado en 1985, reconoce a "figuras religiosas de renombre internacional, o a personas u organizaciones que hayan realizado contribuciones destacadas a la sociedad y cuyas acciones reflejen la tolerancia, la esperanza y la visión, esos aspectos tan esenciales para la supervivencia de la raza humana". Desde hace más de 35 años, ha honrado a personalidades como el 14º Dalai Lama, el teólogo cristiano y activista por la paz P. Emile Shoufani y el cardenal Kurt Koch.
Los galardonados de este año eran todos a título individual: personas que, sin la ayuda de organizaciones o institutos, contribuyen en gran medida a la tolerancia, el encuentro y el diálogo interreligioso. Entre ellos, Fray Olivier, de la abadía benedictina de Abu Ghosh; la Sra. Yisca Harani, conferenciante, guía e investigadora de la historia cristiana y de la peregrinación; y el movimiento interconfesional del Néguev, que reúne a musulmanes, cristianos y judíos en torno al tema de la interconfesionalidad, y entre cuyos miembros se encuentra el P. Piotr Zelazko, Vicario Patriarcal para el Vicariato de Santiago.
"El diálogo es el encuentro de los corazones", dijo Fray Olivier en la ceremonia, haciéndose eco de las palabras de otro galardonado, el jeque Traed Altuna, del movimiento interconfesional del Néguev, quien dijo que fue a través del encuentro que comprendió realmente al Otro. "He estado inmerso en la religión desde la infancia. Pero el encuentro es lo que me permitió superar los prejuicios que tenía sobre las personas que no compartían mi fe".
La ceremonia de entrega, que tuvo lugar en la Universidad Ben Gurion del Néguev en presencia de Monseñor Giacinto-Boulos Marcuzzo, Obispo emérito del Patriarcado Latino, fue seguida de una breve actuación musical a cargo de jóvenes de la Universidad, así como de una conferencia de la profesora Daniella Talmon-Heller sobre Saladino y su postura en cuestiones interreligiosas. También presentó a los tres galardonados y su labor en el ámbito del diálogo interreligioso, destacando cómo sus acciones e iniciativas "se han opuesto a la intolerancia, la ignorancia, el racismo y la violencia" y han contribuido a "un diálogo abierto y respetuoso, basado en su convicción de que las tres religiones abrahámicas pueden unir a las personas".